1) Intención Necesaria: Para que un asalto ocurra, el acusado debe tener la intención de cometer el asalto y la presunta víctima debe tener una aprensión razonable por el daño inminente.
2) Intención general: El asalto y agresión se considera un delito de intención general. Esto significa que la intención que causo el daño específico resultante del contacto no deseado, no necesita ser probada, sólo la intención de cometer un acto de contacto no deseado. Por lo tanto, si el acusados toca el brazo de una presunta víctima como un contacto no deseado y el brazo se quiebra como consecuencia del toque, no importa que el acusado no tuvo la intención de romper el brazo, lo único que importa es que el acusado tenía la intención de tocar el brazo como parte de un contacto no deseado.
3) Negligencia Grave y Imprudencia: Cuando el acusado utiliza negligencia y imprudencia en el momento del incidente, esto puede proporcionar la intención requerida.
4) Más que palabras: Las palabras por sí solas no son suficientes para constituir un asalto, las palabras deben ir acompañadas de un acto que muestre que el acusado en realidad llevo a cabo la amenaza que él se propuso.
5) Grupo: Si asalto y agresión fue perpetrado en grupo, cada participante en del grupo puede ser acusado por ese asalto y agresión.
6) Delito menor a delito grave: hay estatutos legales de acrecentamiento que se toman en cuenta al considerar si un asalto y agresión es un delito menor o un delito grave. Un delito menor de asalto y agresión se convierte en un delito grave si se dirige contra:
- Cualquier persona debido a su raza, religión, color, u origen nacional
- El jues, oficial de la policía, o bombero en el desempeño de su deber
- Un maestro, subdirector, director o consejero de una escuela
- Un trabajador de salud en el cumplimiento de su deber
